sábado, 20 de septiembre de 2008

El dia inolvidable


Huy hablarles del día en que tuve a Joaquín, bueno es recordar lo nerviosa que me sentía cuando empezaron los dolores; una mezcla de angustia, nervios, alegría, temor es decir muchos sentimientos encontrados.
Fueron días de bastante emoción, y digo días porque me tomo 4 desde que empecé; idas y venidas del hospital contracciones, dolores de parto, cansancio así transcurrió el tiempo. Si más no recuerdo me internaron a las 10 de la noche del 1ero de febrero, de allí mas contracciones, una gritona a mi lado que esperaba a su segundo bebé y mientras la escuchaba pensaba: ¿a que hora me darían decía los dolores que tenia la señora?, porque gritaba de tal manera que las enfermeras le decian: "señora esta asustando a las mamás primerizas", ella era todo un caso.
Recuerdo que hasta tuve fuerzas para subir las escaleras para poder agradecer a Dios en el Recinto Sagrado de mi congregación Mahikari y rogar por que me permitiera dentro de su voluntad pasar sin novedad ese momento.
Todo parecía salir perfecto, el 2 de febrero del año 2002 a las 5 en punto de la mañana, nació Joaquín un bebe lindo con los ojos grandes y abiertos quien sólo lloro 30 segundos, luego se calmó, en ese momento demostró signos del carácter tranquilo y dócil que tuvo y tiene hasta la fecha.
Había nacido, y yo, pesar de haber pasado esos días sin descansar, no podía dormirme y no pude dormir solo por las ganas de verlo, era como si estuviera soñando me parecía mentira que lo tuviera a mi lado.
Pasaban las horas y mi Joaquín me hacia sentir cada vez mas mamá por su dependencia y necesidad de cuidado. Empezó allí la difícil tarea de cuidar a mi bebé y dejar que el instinto materno surgiera poco a poco.

Desde su llegada



Desde que nace, un hijo, te cambia la vida y me atreveria a decir que te la cambia al enterarte que llegara en unos meses.

Es entonces que empiezas otra etapa de tu vida, en la que debemos en poco tiempo, adaptarnos a situciones nuevas e inesperadas.

Pero sepan uds, que nadie tiene la receta para ser padres, es que nadie sabe realmente como lo seremos hasta que nacen los hijos y allí empezamos a tratar de serlo.
Hasta ese momento todo es teoría, que la abuelita dice que uno tiene que hacer esto o aquello, la mama otros consejitos mas y hasta las amigas tratan de aportar ... en fin todos por un solo objetivos ayudarnos a ser buenos papas.

Pero fue cuando nació Joaquín que comprendí la gran responsabilidad que asumes al ser padres, cuando sientes que ese ser depende de ti y lo frágil e indefenso que esta, ese momento es único y especial, sin duda.....